CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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Cuando Diógenes se hizo futbolista todo el mundo se quedó extrañado en el templo del saber y el conocimiento. Los filósofos y los grandes pensadores le veían correr delante del balón, pero no decían nada. Nadie quería dejar en evidencia un posible error de consideración.

Realmente era malo Diógenes. No daba nunca al balón. Todo el mundo le miraba, hasta que llegó una persona un poco más inocente y le dijo “¿no se da cuenta de que el futbol no es para usted? Va usted detrás del balón y cuando se lo pasan ni siquiera consigue darle. Va usted dando patadas al aire. ¿No sería mejor que se dedicara a otra cosa?”

Entonces Diógenes le dijo: “ese soy yo; no puedo ser de otra manera. Si yo no fuera Diógenes me gustaría ser Diógenes, dando patadas al aire detrás de un balón, porque yo no busco el éxito, ni siquiera que me fiche el Madrid, el Barcelona, el Manchester o el Boca Junior. De alguna forma ya participar me da alegría. Pero de todas formas lo que yo siempre he hecho es buscar al ser humano, y eso es parecido a ir detrás de la pelota. La encontraré, no te preocupes.”

“Cuando vivía en la tierra mi morada era un tonel, es decir, un objeto con la entrada redonda, y ahora voy detrás de la esfera. La gente se extrañaba de que personas tan importantes vinieran a verme a mi tonel y de que caminase con la lámpara encendida por entre la gente. Ahora ese tonel con esa boca redonda, ese círculo, se ha transformado en una esfera, y el humano que busco es el que es similar al sol con su fotosfera; es el humano con una esfera iluminada a su alrededor. Eso es lo que busco ahora.”