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Al considerar el cuarto castillo podemos encontrar sentido a qué ha sucedido en el tercer castillo, cuál es la propuesta del castillo azul, el castillo del tiempo, del fuego.

Encontramos que la frontera del surgimiento del cuarto castillo está en el guerrero 13, que es la forma transcendente del programa; hay un programa y su forma transcendente es la conciencia expandida, que es lo que significa el guerrero 13.

Y la cuarta onda del castillo cuarto es la onda del guerrero.

Así, lo que habita en el cuarto castillo, y cuyo nacimiento ha sucedido en el tercer castillo es el nacimiento de la conciencia.

 

La presencia del guerrero 13, mostrando la transcendencia del programa asociado a la conciencia, propone al ser real como un ser que necesita expandir su conciencia para ser real, de modo que si el ser humano no expande su conciencia, está en un submundo, en una realidad posible pero no plena.

 

El desarrollo de la onda que contiene el programa, que es la onda de la semilla, va paralelo y  avanza simultáneamente con el ascenso de la kundalini a nivel personal.

La onda de la serpiente se sitúa en el lado izquierdo de la columna resonante, como en la parte física del ser humano, y la columna de la semilla se sitúa a la derecha, en la columna 8 que expresa la integridad y que, como corresponde al color amarillo de la onda, es una expansión.

 

De modo que cuando estamos hablando de la conciencia, lo hacemos también de la plenitud de la energía luminosa en el interior del ser humano.

Cuando el ser humano expande su conciencia, también está desplegando su energía luminosa, entrando en armonía con la realidad más allá de la forma.

Se trata de un ascenso dimensional donde todo es armónico, pleno y gozoso, y de alguna manera es similar al vuelo del águila o a la experiencia que se expresa con el cuento de la Cenicienta.

 

La Cenicienta expresa un auténtico guerrero espiritual, donde no entra al juicio con la adversidad, sino que se mantiene en su centro. Y desde ahí dialoga con dimensiones superiores, como se expresa en el diálogo con el hada madrina y con los ratones, y en general con todos los acontecimientos extraordinarios que concitan su actitud íntegra.

 

De modo que cualquier persona que nazca en el cuarto castillo, cuando abandona el juicio o el papel de víctima o todos esos tipos de vibraciones que le derrotan, y se sitúa en su centro, alinead@ con el corazón amoroso y dialogante de la realidad como expresa la Tierra (primera onda del cuarto castillo), se expande como un guerrero espiritual.

 

La Cenicienta traduce a Luke Skywalker. El guerrero tiene como onda asociada al caminante del cielo, de modo que todo guerrero en realidad es un caminante del cielo.

Por eso es importante reconocer la realidad de guerrero de la luz presente en todas las personas que se han encarnado en este tiempo en un cuerpo de mujer, y que combaten desde su feminidad en favor de la paz y en favor de la vida, y por supuesto en favor del amor.

En este tiempo, donde se está produciendo un nuevo nacimiento espiritual es necesario escuchar a la mujer y reconocer su sabiduría, que es la sabiduría del amor y también del agua, porque la mujer es dueña del agua.

La frontera de la cuarta dimensión en estos momentos en las sociedades presentes está en el reconocimiento de la mujer. Pero en la mujer también existe esa frontera, y atentar contra la vida nunca es una solución.

 

El guerrero de la luz también puede caer en el lado oscuro, que es cuando actúa desde el miedo, no desde el amor.

El arma del guerrero es el ensueño. Si el guerrero no puede crear visualmente una realidad maravillosa, es un guerrero derrotado, es decir no es un guerrero, no ha expandido su conciencia, y en todo caso es un espejismo si se cree un guerrero.

La noche, onda azul del cuarto castillo, expresa una actitud, pero su contenido está en la onda del perro, en el amor incondicional.

Por eso muchos eslóganes acerca del derecho a decidir serán políticamente correctos, pero no expresan al guerrero, porque no son incondicionales.

 

El regalo del guerrero, o su desafío, es el amor, o sea la incondicionalidad.

El ensueño, es decir la noche, es un ver la luz en la pared de oscuridad.

Gracias guerrer@s