CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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Es importante estar dispuesto al cambio. Decimos que es importante estar “dispuesto”, y aquí la palabra que lleva el peso es “dispuesto”, porque la facilidad, a lo que el ser humano parece estar más inclinado es a la repetición. Cuando repites, cada vez eres más experto y capaz en algo, pero la repetición te priva del salto cuántico, del salto dimensional, que te obliga a no repetir, a entrar en algo que no conoces, ya que si es algo que conoces es lo mismo que donde estabas. Por eso, la repetición te da maestría en un nivel, pero te impide el acceso a otro nivel.

En algún momento hay que afirmar y decretar con rotundidad que estás dispuesto al cambio, a abrir la puerta a ese cambio, a ese salto. De hecho, de alguna forma pudiera ser que a través de muchos cambios, de esa apertura al cambio, estás empezando a situarte con facilidad en la no repetición, de tal manera que de alguna forma empieza a ser parte de tu cotidianidad.
La apertura a los cambios facilita el salto cuántico, porque te deslocaliza de lo habitual y poco a poco expande tu conciencia, situándote en escenarios diferentes y despertando en ti a ese explorador, cada vez más conectado con su interior, porque los cambios que haces desde el corazón son diferentes de los que realizas desde la mente, buscando tu beneficio, o desde la fuerza.
A través de esa apertura a los cambios entras en un diálogo, que cada vez te sitúa en una integridad aumentada.

Cuando te sitúas en los cambios desde la conexión con tu corazón, estás conectando con tu ser espiritual y poco a poco vas sintiendo y percibiendo si es desde ahí desde donde favoreces el cambio concreto, o es desde la superioridad, la mente, es decir, el beneficio.
Por eso la forma más adecuada para este tiempo de cambio es la conexión con tu ser espiritual, la conexión con tu corazón, con el corazón amoroso de la vida.