CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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Los egiptólogos, los estudiosos de la civilización egipcia asocian la barca de Ra con la reencarnación. Ra es el dios del Sol, el dios de la luz, el sol mismo, que durante el día según esa mitología hace un viaje en la barca acompañado de las tres figuras que le representan (Khepri, Ra y Atum), pero por la noche va en otra barca y entonces se mueve por el mundo de los muertos. Esto los estudiosos lo consideran como un ejemplo, algo que está hablando de la reencarnación.
Sin embargo, en estos momentos, en el siglo XXI, donde tenemos acceso a tantas culturas y tantos conocimientos que antes estaban encerrados en los templos y ahora están asequibles a cualquier persona simplemente entrando en internet, podemos afirmar que el viaje de Ra no es algo que está hablando de la reencarnación y entonces de la muerte para otra vida, sino de la experiencia que cada persona puede vivir en su día. Está hablando de todos los seres vivos que se despiertan al conocimiento de otra realidad.

En la barca en la que avanzan por la muerte, Ra va acompañado por varios dioses. En la parte delantera de la barca va Set, que es el que ha matado a Osiris.
Cuando Ra está en el mundo de los muertos, se asimila a Osiris. Hablar de Ra en el mundo de los muertos es como hablar de Osiris. Y resulta que en la barca el primero que le va protegiendo es el que le ha matado: Set. Le va protegiendo de la serpiente Apofis, que es un monstruo que quiere impedir que la barca continúe; quiere acabar con Ra; quiere acabar con la luz. Apofis es como el monstruo del caos y de la muerte, y el primero que le defiende es Set, que supuestamente ha matado a Ra en la forma de Osiris.

Nosotros decimos que lo que significa la barca de Ra es la vivencia de un día, lo que vives cada día en tu acercamiento a la segunda realidad. Entonces, Apofis son todos los obstáculos, todo lo que te impide ser tú. Todo lo que quiere impedirte ser tú está representado en esa serpiente, en ese monstruo que ataca la barca, y el primero que te defiende es precisamente el que te ha llevado a esa situación de crisis, de enfrentarte a la serpiente.
Lo primero que esto pone en cuestión es la valoración que haces de los obstáculos. Los obstáculos no van en contra tuya, sino que en realidad en otra realidad te están protegiendo, porque te están conduciendo, están dirigiendo tu barca, hacia el éxito, hacia el acceso a dimensiones superiores.
Lo que llamamos obstáculos, esas personas con las que te enfadas, esas situaciones que no quieres vivir, en realidad te están dirigiendo a la experiencia del nuevo nacimiento.

En la barca también van otros tres dioses, uno de los cuales es la palabra, Hu. Cuando hablamos de la palabra también nos acercamos y recordamos el significado que atribuimos al arcángel Rafael. Hay algo que te ha llevado a esa situación límite donde has descubierto el valor de la palabra, el valor de la comunicación con Dios, cómo se ordena de una nueva forma la realidad.
La palabra nos defiende, porque te permite comunicarte con Dios y configurar la realidad de otra forma a través de tu palabra. Es un don que tienen todos los seres humanos.

Otro dios que acompaña y defiende a Ra es Sia, la mente. La mente y la visualización ponen en marcha una cascada hormonal en el cuerpo del ser humano.
El ser humano tiene un poder mágico en la palabra y tiene un poder mágico en la visualización. Podemos quitar el adjetivo “mágico” y decir que tiene un poder en la palabra y un poder en la visualización, es decir, lo que dice que sucede y cómo se explica a través de imágenes lo que sucede. Lo que dice que sucede y lo que ve que sucede ayudan a vivir a la persona. Ayudan al ser humano. Y es importante reconocerlo como “poderes”. Decimos “poderes” porque te ayudan a vivir, te ayudan a ser feliz. Pero también es necesario que de manera externa alguien te lo diga, que alguien te diga que tienes este poder. La vida responde a tu palabra y responde a cómo imaginas que es la vida.

Cuando esto lo utilizas adecuadamente, parte de lo cual es lo que estás aprendiendo, aparece el tercer poder, que es Heka, la realidad mágica, que es la realidad, no en esta dimensión sufriente, sino en la realidad maravillosa. Algunas personas creen que la realidad maravillosa es una tontería y las que lo creen así, lo creen para su desgracia, porque conectar con la realidad maravillosa es conectar con la gracia.
Se trata de dar un salto evolutivo, una expansión de la conciencia. Se trata de abrir todos los enlaces de los átomos y las partículas de tal manera que dejen pasar la luz.
Hay una realidad plegada donde la luz no pasa y una realidad desplegada donde la luz está. Y ese es el viaje de la barca de Ra. Lo primero que te ayuda es lo que te desestabiliza, tu crisis, y luego encuentras que tienes esos tres aliados: tu palabra, tu visualización y la propia magia, porque la magia te cuida.

Luego hay un quinto elemento, la serpiente Mehen, que significa “la que se enrosca”, la que te envuelve protegiéndote. Estás protegido. Todos estamos protegidos por la propia energía. Te guía la realidad, te protege la energía y tienes tres aliados que dependen solo de ti: lo que dices, lo que ves y la magia.

Todos estamos protegidos como hijos de Dios, como hijos de lo que “es siendo”, y la magia es conectar con eso.