Es tan fácil chafar el plan, solo que en realidad es imposible.
Bueno, es fácil chafar el plan momentáneamente, pero en realidad el plan de la maravilla existe y continua abierto, a pesar de los constantes desplantes.
Por eso parece fácil, y en la situación momentánea es fácil, no llegar al objetivo, pero en realidad es imposible porque el final es llegar.
La maravilla siempre insiste, porque su ser es siendo y al final ese “ser siendo” llena toda la realidad del ser.