CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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La serpiente para volar tiene que transformarse en perro. Quizá pensábamos que era simplemente sacar las alas de algún sitio y transformarse en serpiente voladora, pero no. Lo primero que tiene que hacer es separarse de la tierra.

La serpiente siendo horizontal dibuja a la tierra, y al separarse de la tierra hace aparecer al dos, al otro. La serpiente, pegada a la tierra, es la tierra en su horizontalidad; una tierra llena de vida y de movimiento.
Como perro y como mamífero vuelve a dibujar una línea horizontal que traduce a la tierra, pero ya es una línea doble, porque con las patas toca la línea horizontal de la tierra y con el cuerpo dibuja, como en un espejo, una segunda línea horizontal, como expresión del otro.

Vemos claramente que la serpiente con su línea horizontal es un uno; para reproducir el símbolo del 1 es suficiente con una línea. La serpiente es un uno y para volar necesita al otro, al dos. Por eso el dos siempre es un regalo, aunque también sea un desafío.
Quizá en el mundo del miedo y de los hechizos el “nos” es un desafío, pero en el mundo del amor es un regalo. El vuelo empieza cuando el otro no es un desafío sino un regalo, porque en el mundo del perro y del amor incondicional, el otro es un regalo. Ese es el primer paso para el vuelo de la serpiente; para que la serpiente vuele necesita convertirse en perro, haciendo aparecer el amor incondicional.

Pero la serpiente eres tú, porque es la expresión de tu energía kundalini, es decir, de tu energía luminosa, y para que aparezca como luminosa el otro es necesario. Entonces es cuando la serpiente puede volar.

Siguiendo la familia de la serpiente vemos que un año es serpiente, otro año es perro y otro es águila, de tal manera que cuando la serpiente vuela, que siempre es en el presente y en el tiempo real, a través de su forma de interactuar y de su servicio, expresa el azul.
Se trata del antípoda, donde encuentras que desde tu “servicio” te adentras en tu ser real a través de tu forma de interactuar.

Sin embargo aún hay que encontrar experiencialmente cómo es que volar el vuelo de águila se transforma en la luz del sol.
De la misma manera que hay una línea recta y polar entre la serpiente y el águila, hay otra que une el perro y el sol. Cuando la serpiente se transforma en perro es cuando la serpiente puede finalmente transformarse en luz.