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31 de julio
Enlazamiento de tradiciones hermanas del 31 de julio. Semilla y Espejo en el Tzolkin evolutivo.
Aparecen juntos la semilla y el espejo.
La semilla tiene en su interior, inicialmente de forma invisible, la fuerza de florecer. La semilla tiene una palabra pronunciada en la dimensión del amor que le dice “florece”. Cuando dejas de actuar reactivamente y te paras a escuchar abriendo tus escáneres espirituales, permites el florecimiento.

Al venir junto con el espejo nos dice que esa es la misma fuerza que está dentro del espejo. El espejo también tiene una palabra pronunciada en la dimensión del amor que dice “tú eres yo”, y entonces, cuando la escuchas, activas la potencia que permite aparecer esa dimensión.
Cuando escuchas la ley del amor te instalas en la energía del día verde y en la energía de lo óptimo.
También se dice que el espejo, Tijax, es un cuchillo de obsidiana, que con su hoja corta lo que no es real, haciendo aparecer lo real.
La semilla, con su color amarillo de expansión, también favorece en esa expansión la presencia de lo real, eliminando los hechizos y las distorsiones de la realidad. Eso lo haces situándote en el “no hacer”, sin tratar de que las cosas sean de una determinada manera sino permitiendo sean como son. De modo que ese cuchillo que corta la irrealidad, dejando aparecer la realidad, también está en tu interior cuando te sitúas en tu centro y dices “amen, que lo que tenga que ser, sea”.

Hoy nos encontramos con la semilla 3, que está expresando tu servicio, cómo puede ser útil a tu comunidad, a tu grupo o a toda la humanidad y al arquetipo. Es el momento de pararse y dejar que las cosas sean, como un acto de servicio. “No hacer” como la mejor forma de hacer.
Ese “no hacer” como forma de hacer y de ser útil, aparece hoy, por su asociación con el espejo 9, cargado del poder de llegar a la transcendencia. La fuerza 9 impulsa hacia el final de la onda.
De modo que vemos ese cuchillo de obsidiana que corta lo real, para hacer aparecer lo real, o también ese espejo amoroso que hace aparecer la realidad de dimensiones superiores, caracterizado con el tono 9 de poder, de poder llegar al logro de la transcendencia.

Hay un “no hacer”, un pararse, que es poderoso y además útil, que permite que todo se reajuste. Dejar de introducir confusión permite a la energía actuante de dimensiones superiores hacer aflorar la armonía.
En estos momentos en que durante todo este año vamos a estar con una vibración que nos hace presente el quinto castillo, castillo verde, es aconsejable en muchos momentos pararse, y decir “amén, que lo que tenga que ser, sea”.
Gracias y bendición.