No busquen los grandes hechos, éxitos o heroicidades. Persigan sus pequeños objetivos, de acuerdo a sus capacidades y a su situación. Lo pequeño se convierte en grande cuando se junta con otros pequeños.
No necesitan ser fuertes físicamente o demostrar que son valientes y que pueden con todo. Acepten sus “debilidades”, su forma de ser, sus heridas y lo que todavía no han superado.
Todo eso está bien. Su grandeza es dar esos pequeños pasos que les llevan a avanzar y a compartir sus progresos con los demás.
De esta forma están expresando su grandeza y su luz.
Gracias.