CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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Mirar los símbolos, no para decirle al símbolo quién es sino para escuchar su vibración, es parte de la tarea del hoy y parte de la propuesta del Tzolkin, donde el asunto no es la modernidad sino algo más allá de la modernidad.

Podemos ponerle, sin que eso signifique nada, el nombre de posmodernidad.
No significa nada porque es una palabra que todo lo más quiere atraer la atención. La posmodernidad desde nuestra propuesta sería “pos-letra-lidad”, o sea más allá de lo que se puede expresar con letras o después de la realidad creada por letras, entendiendo que cuando hablamos de letras hablamos del alfabeto fonético.
El alfabeto fonético es la modernidad sobre la expresión con símbolos, pictogramas, jeroglíficos, kines, etc.
La posmodernidad de la que hablamos no es un tema de música o de arte, sino de entrar en algo que tiene más que ver con la telepatía, la clarividencia, la canalización, la apertura de los escáneres espirituales y el mirar desde muchos ángulos a la vez, con un poco de “no creerte nada”, o sea “compruébalo”, pero no vayas a comprobarlo a la enciclopedia sino a tu ser interior, a tu corazón y a tu alma.
Si compruebas las cosas desde el alma, siempre te dirá por qué aquello es bueno. Desde el alma todo tiene sentido, porque no se mueve en esta dimensión circunstancial, sino que está alineada con el corazón del cielo, o sea con lo atemporal y con lo que es siendo.
No es el mundo de los enemigos y de las catástrofes, sino el mundo de los ángeles y de la maravilla -por supuesto, los ángeles son aquellos que están cumpliendo una misión, en favor tuyo-.