Existen caminos porque los seres humanos tenemos pies.
Si los seres humanos no tuviéramos pies ni piernas para andar, no existirían los caminos, no existirían las carreteras, no existirían los puentes ni las escaleras, que son otras formas de caminos. Si los seres humanos no tuviéramos pies, no existirían todas esas cosas ni nada de lo que existe creado por el hombre.
Realmente, si los seres humanos no tuviéramos pies, no sabemos lo que existiría, porque nada de lo que existe creado por el hombre existiría. Parece que lo importante en el hombre son las manos, con su habilidad, o el cerebro, pero si los seres humanos no tuviéramos pies, no existiría nada de eso.
Eso es importante a la hora de resituar y recolocar las cosas y la realidad, porque muestra cómo todo es importante tal y como es. En este tiempo es importante reconocer y honrar, es decir apreciar, lo que existe, tal y como existe, o sea lo que es, tal y como es.
Los seres humanos que en estos momentos no tienen piernas sustituyen esa falta con algo que ejerce la función, dentro del soporte que le dan las demás personas. Es decir, es el conjunto social el que permite incluir a una persona que no tiene pies o piernas en la normalidad.
Pero si como especie los seres humanos no tuviesen pies, es como si su cerebro tampoco tuviese pies y no pudiese ejecutar potencialidades. Es como si las manos tampoco tuviesen pies y tampoco pudiesen ejecutar las potencialidades, que ahora aparecen en las manos.
Y no podrían hacer nada, simplemente por imposibilidad de acceder.
Dentro de cada ser humano hay un montón de potencialidades que no se desarrollan. Existen como posibilidad, pero no se desarrollan. Y no se desarrollan porque se enfoca la creatividad, la energía y las potencialidades en una dirección absorbente. Es como un agujero negro, donde queda atrapada la materia en la inmovilidad.
Sin embargo, el ser humano tiene varias salidas hacia fuera, que le conectan con todo lo demás. Una es la bendición y la palabra, otra es la visión y el reconocimiento de la maravilla, y otra es el amor, que es una emoción, una vibración.
Todo eso te saca del agujero negro, todo eso va hacia afuera.
Todo eso son como los pies, que te permiten moverte hacia el encuentro del otro.
