CUANTA MÁS CONCIENCIA, MÁS GOZO (Extracto del nuevo libro en preparación)
Cuanta más conciencia, más gozo. Normalmente le pedimos el gozo a las cosas, pero el gozo es una vibración y no el resultado de las cosas sino de la conciencia.
El gozo es la vibración normal de la quinta dimensión y la forma de acceder a ella es a través de la conciencia.
Por eso cuando le pedimos gozo a las cosas, no tardamos en darnos cuenta de que no es así. Cuando tienes conciencia no tardas en darte cuenta de que el gozo que vives es una realidad vibracional, cuya puerta es la conciencia.
De lo que se trata es de lo que se define con el color azul: vivencias experienciales que transforman tu conciencia. Hacen aparecer la conciencia y luego la van transformando poco a poco, permitiéndola crecer.
La conciencia te amplía el gozo.
No estoy de acuerdo; porque al ampliar mi conciencia , me percato y me duelt la inconsciencia de los demás; entonces sufro y no tengo gozo..
No estoy de acuerdo; porque al ampliar mi conciencia , me percato y me duele la inconsciencia de los demás; entonces sufro y no tengo gozo..
En resonancia a su comentario, nos ha surgido este escrito:
¿Qué significa haber ampliado la conciencia?, ¿y qué significa no haber ampliado la conciencia y por tanto ser inconsciente?
Si una persona dice “yo he ampliado mi conciencia, yo tengo mi consciencia expandida; vosotros, gente, sois inconscientes; vuestra inconsciencia no está expandida sino que ni siquiera está despierta”. ¿Eso es tener la conciencia expandida?
En latín, “yo” se dice “ego”, de la misma manera que en inglés se dice simplemente “I”. Si una persona se siente sola y aislada, ciertamente no se encuentra feliz. La conciencia expandida es un territorio espiritual. No se trata de un territorio material, de la realidad ordinaria de sufrimiento, de error, de poder, etc.
La conciencia expandida te permite entrar en el territorio de lo óptimo, es decir, en el territorio donde la realidad Dios es plena. Expandir la conciencia es un viaje hacia la realidad de lo óptimo.
En todas las personas, como en todas las cosas y en todos los animales está la realidad Dios, y en esa realidad no hay nada que sea tontería, sino solo maravilla. Es el ego el que separa y divide la realidad, situando lo bueno en mí, en mi ego, y lo malo en todo lo que no soy yo. Entonces tengo que ser más fuerte que lo malo, dominar lo malo, defenderme, tener poder y si no puedo con ello por lo menos lo llamo tonto.
Expandir la conciencia es reintegrarse en la realidad Dios, donde no hay tontos. A veces, la expansión de la conciencia es simplemente una iluminación donde te das cuenta de que aquel que considerabas tu enemigo, o sea un inconsciente, era en realidad un ángel, una emanación de Dios, que te estaba ayudando a despertar.