Viento 13 y Sol 10 en el tzolkin evolutivo.
La vida es una experiencia, un aprendizaje, unas vivencias evolutivas. No son tan importantes los conceptos que aprendemos, las cosas que adquirimos o los logros que conseguimos, sino cómo vamos viviendo y cómo nos posicionamos; lo que sentimos, las actitudes y reacciones que tenemos; la toma de conciencia, la aceptación de lo que sucede; la conexión con nuestro ser interior, la expresión de nuestra esencia luminosa.
Estamos ante un final y un principio (de tzolkin, de año maya, de era…), y podemos configurar nuestra forma de sentir y de vivir.
Nos encontramos ante un nuevo nacimiento, y podemos elegir de forma consciente y voluntaria cómo vivir y cómo queremos que sean los vínculos y relaciones con las personas que nos rodean y con nuestro entorno en general.
Cuidemos nuestro micro-mundo, dedicando tiempo a nosotros mismos, pero también a las relaciones dentro del núcleo familiar que hemos escogido. Es importante respetarnos y respetar a cada persona, proporcionándole espacio para que se desarrolle.
Somos aprendices, sí, pero aprendices de mago.
Disfrutemos de ello.
Gracias
