El 13 es la base de la onda encantada.
En el Tolkin hay 20 sellos que se enlazan de 13 en 13, formando las ondas encantadas.
El 13 aparece en la antigua tradición del pueblo de la libertad y la Pascua. Decimos las 12 tribus peros son las 13 tribus.
También Jesucristo junto con los 12 apóstoles son 13, de tal manera que cuando falta un apóstol, por ejemplo Judas, se incorpora otro.
Los 20 sellos se pueden colocar en 5 niveles, cada uno con los 4 colores. El cuarto nivel, asociado a la cuarta dimensión, comienza con el sello 13, entrando en otra dimensión donde la realidad se despliega. Hay una realidad, que es la que conocemos, y luego una realidad compactada, con la que en ocasiones puedes estar en contacto.
La onda encantada por lo tanto te sitúa en la frontera con la realidad compactada. Cuando llegamos al 13 estamos en la transcendencia y es el momento en el que podemos entrar en la realidad compactada.
Por eso conviene saber cuál es el 14 de tu onda, ya que te está diciendo cosas acerca de ti. Según el juicio de Osiris es lo que te ayuda a recuperar la inocencia de tu alma, para que ésta pese menos que una pluma, porque eso es lo que te permite acceder a la realidad compactada.
