Todavía hay mucha gente que sufre, que no sabe abandonar el dolor, que se siente sola o en carencia.
Quizá puedan mostrarles que no es necesario vivir así, que la enfermedad es un reflejo del dolor interior, que se puede estar en contacto con la madre tierra, con su nutrición, así como con la fuerza del sol. La abundancia existe.
¿Pueden vivirlo y servir de ejemplo? En esta época de transición, ¿pueden aun estar en los dos mundos, el antiguo y el nuevo, y así servir de ejemplo, como una forma de puente entre las dos realidades?
Gracias.
Ana Terapias de Luz. Vía Tzolkin.
