En el camino de la vida a veces hay curvas cerradas, que dan vértigo e invitan a reducir el ritmo. Son ocasiones para entrar en el presente, atendiendo las características del terreno y todo lo que sucede en el entorno.
Y cuando han superado ese desafío la sensación es de fusión con la realidad, con el todo, superación y bienestar.
Entrar en el presente es evolutivo.
Gracias.
Foto de M. Carmen C.
Ana Terapias de Luz, Viatzolkin.com