Aunque cada persona ha avanzado mucho, los diferentes niveles todavía no están sincronizados. Es decir, falta todavía coherencia entre lo que se hace, se dice y se piensa, entre las ilusiones y los hechos, entre la vida espiritual y la vida en el día a día, en la tierra.
La integridad y la coherencia requieren que todo esté alineado y se manifiesten en la misma dirección todas las intenciones y deseos.
Gracias.
Foto de Carmen M., parque de Artaza, en Leioa
@AnaTerapiasdeLuz