CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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Conviene reconocer la serpiente. La serpiente es un símbolo de iluminación, que aparece en la cabeza de los faraones, indicando esa conexión con la luz, como hijos de la luz, que somos todas las personas cuando estamos en el centro, alineados con la realidad de nuestra vida.

Pero conviene también reconocer la propuesta de las naciones americanas, de los pueblos de América, donde la serpiente es el agua. La serpiente, con sus ondulaciones, es el río. La serpiente es un río de agua dulce, que se mueve en la tierra. Entonces, podemos encontrar que la serpiente está hablando de las emociones.

En la visión del antiguo mundo, del viejo mundo, hay una conexión con la luz, pero la aportación de las naciones americanas, del nuevo mundo, que también es la nueva realidad, es que no hay luz sin emoción de amor.

En la tradición andina o en la tradición maya la serpiente recibe las alas del águila, se transforma en un águila, que es un animal majestuoso, fuerte. Pero eso es justamente lo que hace el río. El agua dulce del río toma alas y vuela al cielo, en forma de vapor de agua, llenando las nubes.

Esa es una gran aportación para el ser humano completo, el ser humano de todos y cualquiera de los lugares de la tierra, cómo la emoción pura es la que le da las alas para subir al cielo, recapitulando, reconsiderando las situaciones y manifestándose con la energía divina que no juzga, que no es un juez, sino un padre-madre lleno de amor, enseñando y nutriendo a sus hijos.

Entonces, cuando tú recuperas ese agua pura comienzas, según aumenta la intensidad de tu amor, a elevarte al cielo, a entrar en tu realidad invisible elevándote al cielo, volando como el águila.

José Cabal. Viatzolkin.com