CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

Impulsa tu evolución con las publicaciones diarias y profundiza con nuestras herramientas

Chaplin_The_Kid_edit
Ojo de Horus

13/12/2014
“Privilegio”, según la RAE, que gobierna lo que significan las palabras al menos en el nivel de los despachos, significa “exención de una obligación o ventaja especial que goza alguien”.
Pero si estás exento de una obligación, ¿qué te produce, agradecimiento o pensar qué injusto es el mundo?
En la segunda posibilidad de la RAE, “privilegio” significa “ventaja especial “. Si de repente te encuentras agraciado por una ventaja especial, ¿surge el agradecimiento o el pensamiento de qué injusto es el mundo?
Si vas caminando y de repente te encuentras con un paisaje maravilloso, ¿dices qué bello o qué injusto es el mundo, con tantas personas que no pueden ver esto?
Si alguien tiene un detalle y te regala un libro o una sonrisa, ¿tu corazón está agradecido y contento o dices “qué injusto es el mundo”?

Proponemos el agradecimiento, la alegría o como quiera que se llame, viviendo la realidad sin juicio como forma de elevar la vibración del planeta, permitiendo así a la luz pasar a través tuyo para que llegue a todos, sin secuestrarla.

Hay un cookie o galleta de información donde se han incluido elementos que pueden llevar a la confusión, al enfrentamiento y por tanto a la infelicidad estéril.
El abuelo Chaplin era un maestro de este tema, porque con sus zapatos rotos y su ropa ridícula era feliz, independientemente de las circunstancias externas.
Descubrir el mundo y la dimensión de las emociones, que es algo que no se puede romper si se cae, es descubrir el gozo y también el alma. Estamos en el tiempo de recuperar el alma.

El engaño que se produce en la cookie o galleta de información es el de querer hacerte creer que la tercera dimensión, donde se afirma el ego y lo demuestra poseyendo cosas, excluyendo a los demás y abusando de la fuerza directa o por intermedio de otros, es la realidad óptima.
El engaño es pensar que los privilegios son excluyentes, que hay personas que tienen privilegio y otras sufrimiento.
Personas empáticas y amorosas muerden un anzuelo dentro de la galleta o cookie y parecen quedar atrapados en esa dimensión de las cosas, viviendo una vida infeliz, no por ellos sino porque es injusto.

Muchas de estas personas no saben que ellos mismos quizá son ángeles o que de alguna manera están tratando de encajar las realidades de las demás personas, tendiendo puentes a la sociedad de la estrella. Por ello durante cierto tiempo son parcialmente infelices, ya que nadie puede ser “totalmente” infeliz.
Lo importante es ampliar la felicidad y una de las formas de hacerlo es mirándola. Observando la parte de felicidad de tu vida, siempre crece, haciendo que la parte de infelicidad tenga que buscas trabajo en otro sitio.
Esto es lo que nos cuenta el abuelo Charles Chaplin en tantas de sus imágenes simbólicas. Quizá en otro tiempo hubiese utilizado la piedra, pero como ya estaba inventado el celuloide nos informó ampliamente de esa vía a la estrella.

Algunas personas, que posiblemente sean todas en cuanto escarben un poco en sus recuerdos, se dan cuenta que la felicidad es un destello que aparece súbitamente, sin mucha referencia al esfuerzo que han puesto en conseguir o lograr algo.
Los seres humanos somos un poco como el agua. Hay agua por todos los lados, pero de repente una gota, además de agua, se convierte en un arco iris. Eso es como la felicidad para los seres humanos. Vas de aquí para allá y de repente aparece un arco iris, o sea eres feliz.

Claro, pero si no lo ve nadie, ni siquiera el arco iris es un arco iris.
Un arco iris no es agua y luz, si no hay un ojo que lo ve. Traducido al human@, el human@ es un arco iris que es felicidad ante los ojos de ÉL.
El ser humano es feliz cuando Dios le ve, que es el ojo que te ve siempre.
El humano debería ser siempre feliz, pero no, solamente lo es cuando mira a Dios y se da cuenta de que Dios le está mirando.
Ese es el arco iris. Ese es el privilegio y ese es el trabajo.

Es privilegio porque es gozo, y es trabajo porque a través tuyo Dios puede ver también. Pero si no le miras, paras esa luz y encima no te sientes bien; quizá necesites buscar dinero, emborracharte o robar porque sabes que te falta algo. Te falta tu privilegio, te falta tu trabajo: ver.