La epigenética sabia, es decir con luz, es el Arcángel Rafael, y la epigenética tonta, sin luz, es «la víctima».                 

– ¿Qué le pasa colega?, ¿le ha dado el brote?, está usted desvariando.         

–  Quien sabe. Quizás.

El caso es que todas las enfermedades llamadas genéticas, es decir producidas por genes defectuosos, son en realidad epigenéticas. Es decir, son resultado de una transformación en algún momento, en la vida, histórico, de ese gen, que ha modificado su programa exitoso, eligiendo astutamente, como forma de sobrevivir, deteriorarse y ser víctima sumisa, no lucha, sin valor, deteriorado.

Pero es el momento de la Resurrección. Se acabó. Ahora estamos en el tiempo de amor, no de guerra.

La epigenética es el Arcángel Rafael porque es información. Es el diálogo con tu ser superior, que también llaman doble cuántico, Quetzalcóatl, Cristo encarnado, u otras cosas.

José Cabal. Viatzolkin.com