CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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La Serpiente corresponde a la familia formada por la Serpiente, el Perro, el Águila y el Sol. En la transmisión de José Argüelles forman la familia de la luz, siendo conceptos que se complementan, de modo que la luz es energía, es amor y es creatividad.
La Serpiente, como energía relacional, viene del Sol, o sea de la luz, del amor en el centro, de Dios, o sea lo que los antiguos mayas llamaban en su tradición Quiché el corazón del cielo. Porque así el centro de Dios es el amor, como no puede ser de otra manera. Y es descendente hacia ti y hacia tus hijos a través tuyo. Esa kundalini desciende a través tuyo hacia otro tu. Pero asciende a través de la conciencia, queriendo remontar de nuevo hacia el Sol.
La Serpiente es el Sol, sólo que en forma de energía, disponible para ti.

Además de esta familia, podemos considerar que sus sellos ocultos (Guerrero, Mono, Enlazador y Dragón) también son sellos asociados a la luz.
La fusión de estos ocho sellos presenta la luz como algo asociado a la solidaridad y la energía femenina representada por el Dragón, que es una energía también enlazadora de nacimiento y de expansión de conciencia. El hecho de que se pueda considerar la energía de nacimiento como una expresión de la luz, es porque en la meditación es preciso reconocer oscuridad dentro de uno mismo, de modo que la luz es el comienzo de un nacimiento, que es completado en la expansión. Si ya tienes luz no podrás nacer, y eso parece contradictorio con la necesidad de nacer, o sea de que algo dentro de ti se abra a la luz.
La Serpiente expresa lo más a tierra como lo menos iluminado, lo menos consciente de lo apresado por esta familia, si lo vemos como una escalera ascendente. Sí, hay como una escalera ascendente subiendo hasta el Sol.
Primero, la SERPIENTE pegada a la tierra, lo segundo el PERRO como un escalón ligeramente separado de la tierra, asociado al amor, solo que incondicional, o sea nada que ver con el típico “quiero, quiero” o “yo, yo, y yo, porque yo quiero”. Eso no está en la ascensión. El Perro expresa el inicio de la ascensión o de la iluminación, sobre todo asociado al Mono, que viven en los árboles, en el amar. Y finalmente está el ÁGUILA, arriba, y el SOL.

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