Los físicos son como los Reyes Magos mirando el cielo, buscando señales, buscando ese conocimiento que les haga presente la maravilla de la vida. Los físicos cuánticos, los físicos teóricos, los astrónomos con sus telescopios son como los Reyes Magos, pero también son como los sabios mayas, que escrutaban constantemente el cielo, y en ese escrutamiento encontraban leyes, reglas, conexiones, palabras, que les hablaban de la realidad más allá de la apariencia.
