CALENDARIO MAYA – VÍA TZOLKIN:

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6 de agosto
Enlazamiento de tradiciones hermanas del 6 de agosto. Perro y Semilla.
El perro y la semilla nos muestran que el amor incondicional está en el programa.
El amor incondicional forma parte de ti y solo podrás ser feliz, no cuando triunfes, sino cuando seas incondicional. Lo vemos claramente porque vienen juntos el perro 9 y la semilla 2.
El perro 9, como kin del día, muestra esa energía de la incondicionalidad que te transforma en un mago transcendente.
Pero eso está en tu programa. Podemos verlo porque el nawal del día, que también expresa la energía del día, es la semilla con la fuerza 2, que es una expresión de lo óptimo, porque pertenece a la energía del ensueño (onda noche) y está diciendo cómo tu programa contiene esa energía que te lleva a ser un mago transcendente cuando te sitúas como el dos, como el otro.

La semilla también es la araña en el lenguaje de los nawales. Hace referencia al hilo de la araña por donde desciende Tezcatlipoca. Ese es tu programa, aquel lugar por donde desciende la energía de dimensiones superiores a esta encarnación. Aquí vemos a la semilla, el hilo de la araña, que desciende del ensueño de la noche, es decir, de tu visualización.
Si desde tu interior dejas que hable el corazón, aparecerá el ensueño amoroso descendiendo por el hilo de araña y activando en ti las fuerzas de la inmortalidad, de la activación de las células madre.

La semilla tiene su origen en el guerrero y su destino en el humano. Con esas solas palabras ya estaríamos revelando un arcano.
En sus manos está la ley del amor (espejo) y el amor incondicional transcendente (perro) – gracias, bendición y acogimiento -.

Sabemos que el amor incondicional está lleno de alegría, inocencia, de sabiduría inmediata cuando está guiada por la luz cumpliendo una misión de manera enlazadora (guía enlazador), es decir, de manera amorosa. Y entonces, también tiene las manos llenas, porque en una mano tiene a la luna y en la otra al sol.
Hay plenitud en el momento. Es un momento para la plenitud.
Gracias y bendición.