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22 de junio
Enlazamiento de tradiciones hermanas del 22 de junio. Serpiente y Tormenta.

Los valores atribuidos a la serpiente hacen referencia a la energía vital, la kundalini y la energía luminosa.
En este tiempo parece importante reconocer como algo importante, que también forma parte de la energía vital, a lo expresado por la tormenta, como energía resucitadora. Podemos decir que la serpiente también es tormenta. La energía vital y la kundalini son fuerzas que te resucitan cuando las atiendes convenientemente.
De la misma manera, podemos encontrar en esa energía resucitadora que está presente en todo, en todos y en todas partes, la misma energía de la kundalini personal.

De este modo, cuanto más amplías tu conciencia desde dentro de ti, eliminando todo aquello que no eres tú y permitiendo que se manifieste con claridad tu “programa tú”, que es lo expresado por la semilla como onda asociada a la serpiente, más te incluyes en la energía permanentemente activa de la tormenta como fuerza resucitadora.
Cuanto más eres tú, cuanto más aparece la semilla floreciendo, cuyo florecimiento también es la propia kundalini, más eres tormenta, es decir, más eres una fuerza activa que resucita a todos y todo.
Eso es lo que se expresa a través de Noé. Ese trabajo interior primero incluye a su familia y sus descendientes, pero cuanto más escucha su voz interior, más incluye a toda la creación, o sea a toda la realidad.
En ese trabajo, que inicialmente es interior, se produce una expansión o florecimiento exterior, porque viajan en tu conciencia todos y todo.

La kundalini es una expansión de la conciencia. La serpiente se asocia con la semilla y permite un florecimiento exterior, ya que previamente ha realizado un trabajo interior, que es cuando se asocia como sello con el guerrero, la expansión de la conciencia.

Lo vemos en el espejo que nos ofrecen los abuelos -benditos sean-, desde su atemporalidad, es decir, desde aquello que permanece viajando a través de los múltiples presentes cambiantes, de modo que puede llegar a ti intacto -bendita sea esa manifestación del cuidado y la atención que sucede en el mundo de la conciencia-.
Hay un punto de encaje donde todas las conciencias están despiertas, aunque ese momento no sea en este momento, pero sí en otro momento dimensional.
De esta forma todas las personas están conectadas permanentemente. Eso forma parte de la energía de la tormenta.

La tormenta está asociada a la palabra, la bendición y al hecho espiritual como trabajo personal (sello viento, oculto).
Como trabajo colectivo, esa resurrección de la tormenta que expresa la onda te sitúa en el reconocimiento del mundo de la emoción, ya que pertenece al segundo castillo, castillo blanco del agua, desde el cual vas a abrir de forma coherente todo el contenido de la familia del día verde, situándote en la quinta dimensión.
Pero previamente es necesario que se despliegue la onda asociada del amor incondicional (perro), porque ese contenido emocional de la incondicionalidad aporta la fuerza vibracional de la fuerza resucitadora.
La tormenta es una fuerza resucitadora porque está llena de amor incondicional. Pero aquí lo que estamos describiendo son experiencias personales. La persona primero tiene que reconocer la naturaleza de sus propias emociones, y dentro de esas emociones, reconocer al amor: que sucede desde el amor incondicional, qué le aporta a él o ella, cuándo es amado incondicionalmente, qué sucede cuando se atreve a ser incondicional, amando incondicionalmente, en qué calidad de vida entra.

Hoy la serpiente aparece con el tono 3, que indica que hay algo que puedes hacer al dejar expandir tu kundalini. Tu kundalini aparece como un hijo tuyo, es decir, algo que depende de ti.
Pero al mismo tiempo, vemos a la tormenta 9. Desde el tono 9 los guías dan fuerza a esa resurrección para llegar a la transcendencia.
Trabajar en tu propia kundalini es permitir que todo y todos se revitalicen desde la energía de la tormenta.