Enlazamiento de tradiciones hermanas del 30 de abril. Humano y enlazador.
El kin del día es el humano 2 y el nawal es el enlazador con la fuerza 8.
Es curioso lo del humano, porque todos los que interactuamos con el Tzolkin somos humanos. Hay un sello que de forma especial hace referencia al ser humano, aunque en realidad todos lo hacen, pero no solo a las personas nacidas en un día humano, sino a quien dialoga con el Tzolkin, es decir, a ti, a mí y a cualquiera que haya entrado en esa resonancia.
Se refiere de manera muy especial a personas que nacen en ese día, pero también tiene una invitación más amplia.
Aquí encontramos al humano como el regalo, es decir, aquello que sucede como consecuencia de haber entrado en la experiencia consciente del nuevo nacimiento.
Al vivir la experiencia del nuevo nacimiento de forma consciente, recuperas una inocencia que activa en ti la resonancia del niño divino.
El niño divino está en cada persona, misteriosamente, porque la mayoría hace como que lo ignorara. Incluso más de uno de los que siguen conscientemente esa resonancia del Tzolkin, es posible que hace poco también lo ignorase.
Pero ahora la propuesta es que después de esa experiencia de recuperar la inocencia, te encuentras con una expansión -por eso aparece un sello amarillo- que es la de la libertad y los conceptos elevados.
Si miramos la otra posibilidad del sello 132, al colocar las ondas, aparece el perro 7. Recuperar la inocencia expresada por el humano 2, que te produce esa expansión de libertad sin esfuerzo, porque es gratis como todo regalo, es también la canalización del amor incondicional.
Canalizar significa dejar fluir y no poner.
Cuando miramos el nawal -gracias nawal, honra y respeto a los guardianes- encontramos al enlazador con fuerza 8, que expresa al dragón (familia cardinal), que es luz cumpliendo una misión.
Ese enlazador 8 también es una expresión del amor incondicional, ya que en el Tzolkin de ondas se transforma en el perro 5, que es la representación de cómo el amor incondicional da fuerza a esa forma amorosa de la luz que es el enlazador.
Hoy es humano 2 como kin y encontramos algo extraordinario en que aparezca un sello como el humano, pero también en que ese sello sea el elegido para iniciar cada periodo, normalmente de 4 años y a veces de 8, que surge después de un bisiesto.
Hay una danza mágica que sucede con los bisiestos, porque el kin y el nawal se alejan o se aproximan. Por alguna razón hay un momento en que van a confluir y a ser el mismo. El momento en que esos danzantes, el kin y el nawal, en esa danza chamánica van a coincidir, han elegido que sea un día humano, el humano transcendente, humano 13.
¿Puede ser transcendente el humano? La transcendencia nos espera.
Gracias y bendición.
